Me encantó hospedarme en este pequeño hotel con magníficas vistas sobre el valle. Las instalaciones eran excelentes y el personal era amable y profesional. La habitación era espaciosa, cómoda y muy limpia. Además, la cena y el desayuno fueron deliciosos, y pude disfrutar de una maravillosa tarde en la terraza. Definitivamente recomendaría este hotel a otros viajeros. En general, tuve una experiencia fantástica aquí.

¡Un escape perfecto! El hotel está situado en un lugar tranquilo con vistas impresionantes sobre el valle. La habitación era espaciosa y limpia, con una cómoda cama y una terraza encantadora. Disfrutamos de la tranquilidad y la privacidad que nos ofrecía. El personal era extremadamente amable y servicial, siempre dispuesto a ayudarnos en todo lo que necesitábamos. Además, el restaurante del hotel ofrecía una excelente comida, con platos deliciosos y bien presentados.

No encontramos ningún aspecto negativo durante nuestra estancia en este hotel. Todo fue perfecto y superó nuestras expectativas.

Habitaciones muy bien amuebladas y modernas con un balcón.

El desayuno era de gran valor y el aparcamiento estaba en la propiedad. Ubicación: el hotel estaba justo al lado de las montañas circundantes, del valle y de la naturaleza.

Mi estancia en el Hotel Sokoline fue maravillosa. Pasé tres noches en este encantador hotel ubicado en el borde de un acantilado, con una vista fantástica sobre el valle. La habitación era silenciosa y contaba con una espaciosa terraza, perfecta para contemplar la vista y relajarse leyendo. El personal del hotel era extremadamente amable y colaborador, siempre dispuesto a ayudar. Además, el restaurante en la terraza ofrecía platos deliciosos y el desayuno era abundante y sabroso. También me encantó lo cerca que estaba del monasterio de Ostrog, a pocos minutos en coche. En definitiva, una excelente relación calidad-precio.

Recomendaría el lugar sin duda alguna.

Las habitaciones son muy espaciosas, enormes, y vienen con Wi-Fi y café.

Una buena elección de opciones en el desayuno de gran relación calidad-precio y también increíble. Habitaciones sorprendentemente nuevas y enormes con un climatizador y Wi-Fi, y camas super cómodas. Tiene una ubicación estupenda en Mandici, a pocos pasos del valle, de las montañas circundantes y también de un muy buen restaurante.

¡No hubo nada que no me gustase!

El entorno y las vistas son simplemente impresionantes, una experiencia única y alucinante. El personal del hotel es super amable y profesional, siempre dispuesto a ayudar en lo que necesites. La habitación es amplia, cómoda y está impecablemente limpia. La cena y el desayuno son excelentes, con una gran variedad de opciones deliciosas. La terraza del hotel es maravillosa, perfecta para pasar una tarde relajante y disfrutar de las vistas. En resumen, una experiencia increíble en todos los sentidos.

Excelente ubicación en acantilado

Habitación silenciosa y espaciosa. Personal amable y colaborador.Restaurante en terraza del hotel.Desayuno abundante y sabroso.Cercano al monasterio de Ostrog.Buena relación calidad-precio

Nada, todo estuvo bien.

Nos encantó la ubicación del hotel, justo en la montaña con vistas al valle más grande de Montenegro. Está muy cerca del monasterio, a solo 20 minutos a pie, lo cual fue muy conveniente. Además, la habitación era espaciosa y la terraza era perfecta para relajarse y disfrutar de la vista. El personal fue muy amable y servicial, y el desayuno era delicioso.

Encontramos que la conexión wifi era bastante lenta.

La habitación doble de este hotel es simplemente genial. Tiene una pequeña sala de estar donde puedes relajarte y disfrutar. Además, cuenta con un minibar muy práctico y una televisión de pantalla plana. Me encanta cómo el ambiente es acogedor y acogedor. Como turista, me sentí muy cómodo y relajado en esta habitación.

La única cosa que no me gustó tanto de esta habitación es el aire acondicionado. En mi opinión, es un poco ruidoso.